Tengo la oportunidad de revisar una gran cantidad de productos que llegan a mi escritorio, así que es sumamente fácil perder el interés sobre la mayoría de las cosas que veo. No ocurrió lo mismo cuando conocí a Natalia Fernández y su trabajo “Recuperar Mi Matrimonio”. Al conocerla, me pidió que leyera su trabajo y que opine sobre el mismo. Al principio dude en revisarlo, pero pensé en mis amigos con malos matrimonios y le eché un vistazo para rescatar buenos consejos.
Para cuando había terminado de leer, ya me había enganchado! Por primera vez, pude notar que este libro sería fundamental para las parejas que realmente quieren solucionar sus problemas matrimoniales, y no me refiero únicamente a parejas jóvenes, el libro es aplicable a parejas jóvenes y mayores. No importa cuál sea su situación matrimonial, si es hombre o mujer o cuántos años ha estado casado, hay consejos y herramientas que le ayudarán al desarrollo de una buena comunicación y a la resolución de sus conflictos.
Todo el mundo conoce a alguien que tiene un matrimonio complicado, o incluso podría ser el suyo.
Nunca nadie dijo que el matrimonio era cosa sencilla, y si lo hicieron, mentían. Es totalmente normal que una pareja discuta cuando las cosas implican un esfuerzo mayor que en otros momentos. En un mundo ideal, se sentarían y hablarían tranquila y civilizadamente sobre sus conflictos para llegar a una solución, pero desafortunadamente, las cosas no siempre funcionan así. Es muy sencillo quedar atrapado en ese momento conflictivo y dejar que la relación se deteriore hasta preguntarse por qué uno sigue en pareja.
Natalia ha desarrollado un curso que anima a las parejas a construir formas de interactuar y fortalecer su relación. Se ocupa de temas como:
* Consejos sobre cómo rescatar su matrimonio
* Cómo volver a introducir la pasión
* Cómo reparar su matrimonio después de una aventura
* Auto-evaluación
* Gestos que son más importantes que las palabras
* Y mucho más…
Lo primero que me impresionó es el buen diseño del libro, limpio con buenos gráficos. Esto demuestra la seriedad del producto y que se está adquiriendo un libro que se tomará en serio mi matrimonio y a mi persona.
No puedo dejar de lado la calidad del contenido, no sólo la teoría, sino los ejercicios que acompañan al final de muchos capítulos que ayudan a consolidar los conceptos y aplicarlos a la pareja en la vida real.
Otra cosa que me impresionó, es la gran cantidad de información, tanto en los dos libros principales de “Recuperar Mi Matrimonio”, como en los libros electrónicos complementarios. Puedo decir que es uno de los cursos de ayuda para los matrimonios más completos que he visto!
Más de 2 millones de parejas se divorcian por año y muchas de ellas podrían haberlo evitado con la comunicación y las técnicas que Natalia nos muestra en su curso para cambiar el estilo de vida.
Evidentemente, ella no puede hacer milagros y salvar todos los matrimonios, pero si usted realmente quiere solucionar los problemas y resucitar el amor que alguna vez tuvo por su pareja, puede maximizar sus posibilidades al leer y aplicar los consejos que Natalia ofrece.
Natalia es capaz de identificar en donde están fallando y mostrarle cómo evitar los errores cruciales que realmente ponen en peligro las posibilidades de salvar su matrimonio.
Además de esto, se ha incluido una consulta por correo electrónico gratuito para que los clientes puedan hablar y consultar acerca de cualquier problema específico con una cobertura mayor que la que el curso pueda brindar.
Realmente creo que Natalia tiene facultades para esto y puede ayudarle a salvar su matrimonio!
Las técnicas han sido puestas en práctica y han ayudado a salvar matrimonios una y otra vez. Realmente creo que en esta guía hay algún consejo o ayuda para todos, sin importar cuánto tiempo ha estado casado o que tan fuerte es la relación.
Pero no se quede con mi palabra, corrobórela por sí mismo! Eche un vistazo a:
Prometo que no se decepcionará! Lo mejor de todo es que usted realmente puede cambiar su vida y salvar su matrimonio con un costo bajísimo.
Le deseo lo mejor,
Lucía Crespo.
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